No es lo mismo alimentar a un chihuahua que a un labrador. Conoce por qué el tamaño de tu perro es clave para darle una nutrición adecuada en cada etapa de su vida.
¿Qué tienen en común un pinscher miniatura y un gran danés? No mucho, excepto por una cosa: ambos necesitan una nutrición ajustada a su tamaño. En un contexto donde cada vez se prioriza más el bienestar animal, entender cómo varían las necesidades nutricionales de los perros según su talla es esencial para garantizarles una vida más larga y saludable.
Para Carolina Figueroa, Scientific Communication & Affairs Manager Latam Seeds de Royal Canin, la diversidad de tamaños en los perros —que puede ir desde apenas 1 kg hasta más de 80 kg— no es solo una cuestión de apariencia: “El tamaño determina el metabolismo, el ritmo de crecimiento, la sensibilidad digestiva e incluso los riesgos de salud que enfrentan a lo largo de su vida”.
Perros pequeños: metabolismo acelerado y paladar exigente
Los perros de talla XS y S, como los yorkshire o los pomerania, tienen un gasto energético más alto por kilo y suelen ser más selectivos con su comida. Su dieta debe ofrecer una alta densidad calórica en porciones pequeñas, con croquetas adaptadas en tamaño, aroma y textura.
Además, aunque envejecen más tarde, su esperanza de vida es mayor, por lo que deben prepararse desde temprano para prevenir enfermedades comunes en la vejez como problemas renales o cardíacos.
Perros medianos: activos y resistentes, pero no invencibles
Los perros medianos, tan comunes en hogares chilenos por su mezcla de razas, tienen necesidades nutricionales particulares. Son más activos, viven más expuestos al exterior y necesitan una dieta que les ayude a reforzar el sistema inmune, mantener masa muscular y controlar el peso corporal.
La clave está en una nutrición equilibrada que los acompañe tanto en su vitalidad como en su resistencia natural.
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Perros grandes y gigantes: foco en las articulaciones y crecimiento prolongado
En razas grandes (L) y gigantes (XL), como los golden retriever o mastines, la dieta debe tener un enfoque especial desde que son cachorros. Su crecimiento puede durar hasta dos años, y si no se alimentan de forma adecuada, pueden desarrollar problemas articulares y óseos a largo plazo.
Además, suelen envejecer antes y presentar sensibilidad digestiva, por lo que sus alimentos deben incluir ingredientes funcionales que los ayuden a preservar la movilidad y calidad de vida.
Nutrición basada en ciencia, no en intuición
Royal Canin promueve una visión de la alimentación canina centrada en la nutrición precisa, desarrollada por veterinarios y nutricionistas. Esto significa que cada fórmula considera el tamaño, la edad, la raza, el estilo de vida y la salud del animal. “Trabajamos con evidencia científica para asegurar que cada perro reciba los nutrientes exactos que necesita”, explica Figueroa.
Desde el primer bocado hasta la tercera edad, la nutrición puede marcar una diferencia real en la calidad y duración de la vida de una mascota. “Cuando entregamos respuestas nutricionales específicas para cada etapa y cada tamaño, ayudamos a los perros a vivir más y mejor”, concluye la vocera.
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