Desde usar agua caliente en el parabrisas hasta pensar que un 4×4 lo resuelve todo. Estas son las creencias más comunes al volante en invierno… y por qué conviene repensarlas a la hora de conducir sobre nieve.
Llega el frío, caen los primeros copos y no falta quien se lanza a la carretera con confianza (a veces excesiva). El problema es que no todo lo que hemos escuchado sobre conducir sobre nieve o hielo es cierto. De hecho, algunos consejos bien intencionados podrían terminar jugando en contra.
Para aclarar el panorama, Tomás Ramírez, Gerente de Post Venta y Flotas de Mitsubishi Motors, comparte algunas recomendaciones que podrían ayudarte a moverte con más seguridad y menos mitos este invierno.
1. ¿Agua caliente para el parabrisas? Mejor no
Aunque suena lógico, echar agua caliente para descongelar el parabrisas puede terminar rompiéndolo por el cambio brusco de temperatura. Lo más recomendable es usar el sistema de desempañado del auto (que todos los modelos modernos traen) o una pala plástica para remover la nieve sin dañar el vidrio.
2. ¿El aire acondicionado ayuda a desempañar? Sí, y bastante
Aunque no lo parezca, el aire acondicionado reduce la humedad dentro del auto, lo que acelera el desempañado. No hay que esperar a que haga calor para encenderlo: incluso en invierno puede ser útil.
3. Acelerar con el motor frío para calentar el auto más rápido… no es buena idea
Sí, puede calentar el motor más rápido, pero vas a gastar más combustible y forzar el sistema. Mejor prender el auto, esperar un momento y dejar que la calefacción haga su trabajo sin apuro, especialmente en vehículos de combustión.
4. ¿Bajar la presión de los neumáticos mejora el agarre? Nope
Reducir la presión puede afectar la estabilidad y hasta dañar los neumáticos. Lo ideal es mantenerla según lo que indica el fabricante. Si tu auto o camioneta tiene 4×2 o 4×4, esa tecnología será mucho más útil en caminos difíciles.
Por ejemplo, la Mitsubishi L200 incluye el sistema Super Select 4WD-II, que se adapta a ripio, barro o nieve, sumado a controles de descenso y estabilidad que podrían ayudarte bastante si el camino se pone resbaloso.
5. ¿Subir acelerando y bajar frenando? Mejor no tanto
En pendientes con nieve, lo recomendable es mantener una velocidad constante. Acelerar de más puede hacer que pierdas adherencia, y bajar frenando en exceso puede jugarte una mala pasada. En mecánicos, usar el motor como freno (bajando un cambio) suele dar mejor control.
El Mitsubishi Outlander, por ejemplo, cuenta con S-AWC, un sistema que distribuye la potencia en cada rueda para mantener el control en superficies inestables.
6. ¿Si tengo 4×4 no necesito cadenas? Ojalá fuera así
Aunque el 4×4 mejora la tracción, no reemplaza el uso de cadenas en condiciones extremas. Además, en muchos caminos de montaña en Chile, llevarlas es obligatorio por ley, así que no hay excusa (ni salvación) frente a un control policial.
7. ¿Hay que ponerle peso al pick up para tener más control?
Antes sí. Hoy no tanto. Modelos actuales como la L200 cuentan con sistemas de asistencia como el Control Activo de Estabilidad (ASC), que pueden frenar ruedas individualmente o ajustar la potencia del motor para ayudarte a mantener el control, incluso en curvas o caminos con baja adherencia.
Conclusión: nieve, sí; mitos, mejor no
Conducir en caminos nevados no tiene por qué ser una pesadilla, pero sí requiere preparación, sentido común y aprovechar las herramientas tecnológicas del vehículo. Evitar errores comunes podría ayudarte a disfrutar del invierno con más seguridad y menos sorpresas.
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